Diario de Noticias de Navarra junto a Tabernas de Navarra tiene un proyecto muy bonito de entrevistas llamado «Desayunos DNN». Os invito a leer la entrevista que me han hecho y a escuchar el podcast que han grabado. Me encanta participar en este tipo de iniciativas y poder difundir un tema tan necesario como la parentalidad positiva.
Educar como guías de nuestros hijos
Pasos para empezar a educar emocionalmente
En algunos casos, lo primero que necesitan los padres es un proceso personal, incluso terapéutico, para sanar sus propias heridas. A veces los traumas complejos de la infancia dificultan acompañar a los hijos, porque sus experiencias duelen tanto que uno acaba sobreprotegiéndolos, evitando que se equivoquen o allanándoles el camino para que no sufran. Pero esa actitud, lejos de ayudar, puede impedir que aprendan.
Por eso, muchas personas necesitan primero trabajar lo que llamamos su “niño interior”, es decir, hacerse conscientes de cómo esas vivencias del pasado les están impidiendo ejercer una crianza saludable, coherente con lo que la ciencia recomienda en cada etapa del desarrollo.
Y hay otros que van a agradecer estar en grupos de formación, como ‘Padres formados’ que nace en 2010. Llevamos 15 años con escuelas de familia, escuelas de padres y madres, grupos formativos. Allí puedes encontrarte con personas que tienen inquietudes o necesidades similares a las tuyas, pero si quieres ese grupo lo que encuentras es información, información con respaldo científico para que tú puedas tomar decisiones.
No se trata de que te digan cómo educar a tu hijo o qué pautas seguir, porque sería un auténtico error. Sí que hay bases, principios y sabemos cuando un niño tiene una rabieta qué es lo que más va a agradecer su cerebro en términos generales, pero luego ese niño tiene un temperamento concreto, que eso es genética.
Se está desarrollando un ambiente específico, el ambiente familiar que tiene su entorno social, tiene una edad, un carácter, unos hermanos que le hacen ser de una manera de otra.
Entonces, cuando tú educas, tienes que conocer qué es lo mejor para ese cerebro en términos generales, pero luego lo tienes que adaptar a ese niño y luego también a ti como persona. También hay que entender que educar es construir una relación. Entonces, para construir esa relación con mi ese vínculo afectivo, hay que crear apegos seguros, hay que tener una comunicación lo más asertiva posible, poder empatizar con ese niño cuando llora para saber qué respuesta es la que necesita en ese momento.


